El envío de correo no deseado es una práctica de márketing agresivo. Y por desgracia ya ha saltado la barrera y se ha adentrado en la arena política. En Estados Unidos es una práctica habitual desde hace tiempo, ya que no se considera spam al no tener finalidad comercial (vía PCWorld). Pero no son los únicos. En la reciente campaña alemana es una herramienta que se ha utilizado, de la misma manera que en España la utilizan principalmente formaciones vinculadas a la derecha más reaccionaria (vía Noticias.dot). En Sudamérica tampoco se libran y México (vía la Cofradía) y Chile (vía imc-chile) son buenos ejemplos.
Utilizar el envío masivo de mails y en algunos casos de sms con consignas políticas con el objeto de convencer a los indecisos es muy barato, no supone apenas incrementar el coste de una campaña electoral. Pero, ¿es éticamente correcto? Si uno lo analiza fríamente, en época electoral nuestros buzones se atiborran con propaganda política, nuestros teléfonos reciben sms con consignas y el bombardeo de los mass media es constante. Entonces, ¿podemos denominar spam a este tipo de correo electrónico?
Desde luego que el objetivo no es económico sino político, pero podemos clasificarlos en dos grandes grupos. Aquellos que intentan convencer al futuro votante de una opción y aquellos otros que utilizan la descalificación como arma arrojadiza. Precisamente para hacer ver al futuro votante que cierta opción no es buena y que en consecuencia ellos si son los «buenos».
Desde luego, y debido a la desafección política reinante, los únicos que buscan información, para ejercer su derecho consecuentemente, son los que ya están movilizados y en principio «captados políticamente». El «desafecto» no quiere recibir esta información, para él es una molestia.
Teniendo en cuenta todo esto, sopesando los pros y los contras de utilizar técnicas agresivas de «venta» política, ¿no será contraproducente utilizarlas? ¿Vale la pena rozar el límite de la legalidad?
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Ivan, imagino que al ser un campo totalmente nuevo por desarrollar, las primeras acciones vienen aconsejadas por asesores provenientes del e-commerce y como en todo, usar una herramienta completamente nueva puede abrir muchas posibilidades, pero tambi�n entra�a riesgos.
Y si, creo que tienes raz�n, el concepto de campa�a viral funciona, y desde luego es el m�s barato y el que entra�a menos riesgos a cualquier nivel, ya que el emisor normalmente es conocido por el receptor, anulando la desconfianza del «desconocido» y adversi�n del «spam».
Los pol�ticos llevan sus mismas idea de como promocionarse a la red y lo �nico que se les ocurre es mandar miles de correos que resulta barato, pero en muchos casos contra producente y poco efectivo.
solo recuerdo dos casos interesante (no necesariamente buenos) de la red y la pol�tica: el primero es una nota que vi de Espa�a, el Gobierno Vasco hab�a estado comprando palabras clave en adsense sobre un tema especifico que se estaba debatiendo y de esta manera atra�a gente para que leyera su punto de vista, no se si funciono pero me parece una buena idea para darse visibilidad.
El otro caso que recuerdo es en la pasada campa�a para presidente de la rep�blica en M�xico, cuando la campa�a estaba terminando y estaba muy cerrada la votaci�n, empezaron a circular muchos correos para desprestigiar a ciertos candidatos (los que al final perdieron) los correos eran chistes o im�genes retocadas, muy fuertes yo me imagino que m�s que una campa�a orquestada fue solo tirar linea desde los partidos y la propia gente armo su correo y de verdad recorrieron todo M�xico (�una campa�a viral?)