¿De qué sirve un servicio de propuestas electrónicas al gobierno si éste no se refleja de ninguna manera en la agenda política?
Es un problema que en Reino Unido ya han detectado y con el que seguramente nos vamos a empezar a encontrar. Nosotros tenemos encima de la mesa herramientas que nos permiten conocer, al menos en parte, el interés de la ciudadanía respecto de determinados temas. Incluso se está trabajando en proyectos, véase el propuestómetro, para intentar «prototipar» una herramienta usable tanto por la administración como por la ciudadanía para que las propuestas de estos últimos lleguen de manera adecuada al gobierno y a la administración.
¿Pero de qué sirven si después no se les hace el más mínimo caso? De nada. Al menos en positivo, por que en negativo sirven de mucho:
- Crear descontento en la ciudadanía,
- Aumentando esa desafección que tienen por lo público y por los que lo gestionan, los políticos.
Por todo esto ¿Qué propone David Cameron en Reino Unido? Pues sencillamente que se defina un número mínimo de peticionarios de una propuesta para que este entre a formar parte del debate de la cámara y que se vote en consecuencia.
Hay que decir que tienen un servicio on-line que se llama e-petition y que tiene una muy buena aceptación y uso por parte de la ciudadanía, pero que de momento no tiene una traslación real a la cámara legislativa británica.
Sería por lo tanto, dotar de oficialidad a un sistema electrónico y adaptar la ley a esta nueva realidad. De la misma manera que la Ley Orgánica 3/1984, de 26 de marzo, Reguladora de la Iniciativa Legislativa Popular tendría que tener su adaptación y reflejar la posibilidad de establecer un sistema electrónico de consulta y de iniciativa popular.
En esta misma línea, la Constitución prevé, también, la participación directa de los ciudadanos en el proceso de producción normativa, configurando al pueblo, mediante la presentación de 500.000 firmas, como sujeto de la iniciativa legislativa. Este reconocimiento constitucional de la iniciativa legislativa popular permite, de un lado, instrumentar la directa participación del titular de la soberanía en la tarea de elaboración de las normas que rigen la vida de los ciudadanos, y posibilita, de otra parte, la apertura de vías para proponer al poder legislativo la aprobación de normas cuya necesidad es ampliamente sentida por el electorado, pero que, no obstante, no encuentren eco en las formaciones políticas con representación parlamentaria.
Si actualmente con 500.000 firmas autenticadas se puede iniciar un procedimiento de «iniciativa popular» por qué no hacerlo utilizando un sistema:
- público,
- open source,
- dónde la autenticación se realice contra el censo,
- dónde la apertura de iniciativas sea popular y
- dónde una vez alcanzado un número determinado de votos pase a introducirse en la agenda política. Es decir, que sea vinculante.
Nos libraríamos de fraudes como el que se produjo en la campaña pro-referéndum impulsada por el PP y además acercaríamos los problemas de la ciudadanía a la clase política, al menos aquellos que consiguieran un mínimo de votos.
Podría ser una manera de incentivar la participación muy buena. Por que cuando uno ve que su acción sirve para algo se mueve, colabora, participa…
Señores del gobierno y de la oposición, ¿para cuando una iniciativa de este tipo?
PD, contenido publicado también en Bottup
los politicos no dan fuerza a estas iniciativas porque eso recorta su margen de hacer lo que les venga en gana. hay que dar más potencia a la spropuestas populares, pronto diremos como.
Puede que algunos de los aspectos de gobierno electrónico UK vaya muy por delante de nosotros y de muchos otros países democráticos, pero creo que en otros -y pienso en la Cámara de los Lores- la transparencia e interacción democrática en Internet no es tan loable. Dicho esto, creo que hay un tema que debemos tener más de referencia: el conocimiento y la percepción que los propios políticos tengan de las NTIC. A modo de ejemplo, cuando un político no sabe -literalmente- manejarse en un ordenador, es muy probable que las directrices de su gobierno no tenga interés en utilizarlas en nigún sentido. Sucede, en términos generales, en los políticos que pertenecen a una generación anterior.
Ahora bien, yo también creo que el potencial de estos medios está en la ciudadanía, en cómo ésta vaya utilizándolos y la presión que consiga hacer para conseguir que a los políticos les resulte imposible prescindir de ellos. Y esto -no nos olvidemos- interesa mucho mucho más en sistemas políticos en los que los candidatos son elegidos directamente por sus ciudadanos y mucho menos en los que el mayor compromiso de los políticos son las directrices de sus partidos.
En cuanto a lo del Parlamento Vasco, y con todo mi pesar, creo observar que se trata únicamente de un foro de «pregunta-respuesta», igual que hace mucho años -con diferente formato- se inició en el Senado de España. El resultado suele ser el mismo en estos casos (por cierto, en unas consultas que se hicieron en UK también tuvo el mismo resultado): Falta de compromiso político.
Recuerda que en Euskadi ya tenemos petición electrónica: http://partaide.parlam.euskadi.net/
Reino Unido camina a miles de millas por delante. Se están enfrentando ahora a problemas que nosotros ni siquiera tenemos. De momento, nuestra prioridad debe estar en conseguir que la gente quiera participar en lo público, y eso tiene mucho que ver con que participe en otros ámbitos como la escuela, el taller y el barrio.
Es difícil pensar, cuando todavía la cultura democrática apenas está arraigando en este país, que vamos a pasar de la noche a la mañana a un sistema de democracia directa. Pero todo apunta a que los sistemas políticos de los países avanzados van a evolucionar hacia formas más participativas.
Cuanto mejor se hagan las cosas más rápido avanzaremos y la ciudadanía tiene un papel importante que desempeñar en ese proceso. Al fin y al cabo, a los partidos les toca ceder poder, por lo que habrá resistencias internas. Pero a los partidos también les toca posicionarse y adaptarse para sacar provecho de esa evolución, que como todos los cambios representa amenazas y oportunidades. Para todos, también para los partidos políticos.
Hace poco leía en el blog de esPublico un interesante post sobre la elección directa de alcaldes en Alemania. Las cosas estas cambiando. Poco a poco, pero la política también se mueve.
Hay espacio para el ciberactivismo en ese proceso apasionante. Aportaremos nuestro granito de arena.
Deberían cambiar la Ley. Propongo que con 500.000 firmas se pueda convocar un referendum
» autor: PadreMurfhy