Este pasado lunes se dio visibilidad al canal puesto en marcha por la unión europea en youtube, EUtube, y es cierto que la expectativa que ha desatado en el ámbito internacional es elevado. Creo que puedo certificarlo en cierta medida ya que debido a la entrada que escribí el otro día el volumen de visitas que me llegan buscando información al respecto es bastante grande.
Pero lo curioso y tal como Alberto Ortiz nos apuntaba en los comentarios es que la UE no se hubiera decantado por invertir en desarrollar un servicio europeo. Pero lo más curioso es que lo realmente está levantando pasiones de dicho canal es, en concreto, un vídeo que promociona el cine europeo.
Un vídeo en el que hay orgasmos a gogó, de todo tipo. En unos baños, en habitaciones, en una cocina e incluso una escena de carácter homosexual. Según el blog «al abordaje» no se ha hecho esperar la protesta de la conservadora Polonia por dicha puesta en escena.
Llegados a este punto yo ya no sé en función a qué tenemos que medir el éxito de un canal de comunicación con la ciudadanía. Por que está visto que el morbo por el sexo o por aquello políticamente incorrecto (según algunos) es lo que realmente levanta expectativas y provoca el uso de dichos canales.
Para que os hagáis una idea los vídeos más visualizados no llegan a las dieciocho mil reproducciones mientras que el famoso vídeo de los orgasmos, «Film lovers will love this«, va camino ya del millón y medio. Vamos que no hay color.
¿Nos da esto una pista de cómo incitar a la ciudadanía a utilizar un medio de comunicación puesto en marcha por una administración pública? No veo yo al Ayuntamiento de Barcelona emitiendo un vídeo con contenido sexual para llamar la atención sobre sus servicios. Pero igual si que nos puede indicar que sólo acudirá un ciudadano a dichos servicios cuando la información allí mostrada sea de utilidad real o de interés para él mismo.
Imaginaros si en el callejero de Barcelona, que es el servicio más visitado de la web, se incluyera un directorio de sitios de la ciudad dónde se pueda practicar sexo. Creo que se desbordarían los servidores.
Me produce por lo tanto cierta «pena» que el éxito de un servicio de este tipo se deba precisamente a un instinto básico, pero necesario, del ser humano. Definitivamente la administración pública no podrá nunca competir con dichos intereses. Ésta está condenada a la «long tail».
Pues mira Félix no había pensado en que podía ser una estrategia oculta para incentivar la natalidad. Tal como dices a ver si nos sorprenden con los próximos programas electorales.
Saludos,
Perdona, Carlos, pero es que el vídeo es muy bueno. Agrupar en unos 15 segundos tal cantidad, variedad e intensidad de sexo es todo un record.
Además, ¿no es un objetivo de las administraciones el bienestar de sus ciudadanos? ¿y qué mayor bienestar que el que se obtiene después de un buen polvo?
Si se dan ayudas públicas para la creación de nuevos ciudadanos (2.500 € del ala), ¿porqué no darlas, por poner, para las actividades previas necesarias? ¿o es que es algo tan sucio y feo que no debemos ni mentarlo (modelo iglesia católica)?.
Yo estaría atento a los programas de los partidos para las próximas elecciónes… quizás nos llevemos alguna sorpresa.