Que no nos pase nada

Vivimos en un mundo globalizado y ahora es más fácil que nunca poder dar soporte a multitud de campañas en favor de las cosas más impensables. Con un solo click del ratón podemos apuntarnos en cientos de grupos de Facebook, firmar campañas on-line e incluso transferir fondos a ONG’s como Médicos sin Fronteras o Amnistía Internacional.

Estamos empezando a pensar en global ¿Pero se nos está empezando a olvidar a pensar en local? No hace mucho  Ariadna tuvo una bajada de tensión a media mañana cerca de casa y tuvo que sentarse. Bajo la mirada atenta de varias personas entre ellas las de las dependientas de una tienda de fruta tuvo que seguir con su mareo ella sola. Una señora al intentar ayudarla y pedir un poco de agua e dicha tienda le dijeron que no hiciera caso por si estaba drogada. Hasta que al final un señor acudió a una gestoría y le dieron un poco de agua y ayuda.

Este individualismo y poca reacción hacia el prójimo me preocupa y más cuando esta mañana en las noticias he visto el siguiente vídeo en el que una mujer en un hospital de Nueva York sufre un ataque en la sala de espera y no es atendida hasta más de una más tarde. Espera que ha provocado la muerte de la paciente.

http://es.youtube.com/watch?v=oMl1oQZwv7E

Vamos a pensar un poco más en local, ser menos egoístas y además de preocuparnos por estar orgullosos de conducir un monovolumen (campaña ridícula donde las haya) vamos a tender la mano a los que tenemos a nuestro alrededor.