Hay muchos tipos de vidas digitales. Las hay que expresan en toda su sensibilidad el alma de una persona, las hay que esconden aquello que más les hace resaltar en el tú a tú, las hay que son un mero reflejo de lo que hay e incluso las hay hacedoras de superhéroes.
Los comportamientos que se desprenden en esas vidas digitales pueden ir desde la timidez a la más absoluta osadía, amparándose en reglas no escritas. Reglas que en muchas ocasiones sólo están presentes en la mente del que se las imagina.
Esas vidas digitales pueden ser identificativas o anónimas. Unos quizá intentando mostrar aquello que quieren y los otros mostrando aquello que realmente son.
Hay mucho por hacer y por decir. Son muchas las conversaciones que uno puede entablar o sencillamente rechazar. Se puede negociar y perder, se puede repudiar o adoptar una amistad, pero lo que es seguro es que de la misma manera uno establece su mundo «real» también define su destino «digital».
Hoy sencillamente he repudiado y bloqueado a alguien que sin conocerlo dice haberme preguntado. Pregunta hecha al viento de los ceros y unos que sin un nombre concreto es como intentar que llegue una carta sin su destinatario. Pero no sólo eso, resulta que cuando alguien no habla de un tema que a ti te interesa resulta que tienes que estar en contra de su opinión y sencillamente te descalifica por que sí.
Pero por otro lado también he «conectado» con alguien que me ha demostrado razón y sobre todo sensibilidad. Alguien que me ha discutido y con quien ha sido un placer establecer una «relación digital» que espero algún día se desvirtualice.
Es indudable que en el mundo de las «ideas» hay muchas y variadas vidas digitales. Cada una de ellas con su calidez y su humanidad. Espero poder convervarlas todas durante muchos años…. Muchos…
Bueno, si hablaramos de vida digital ‘sensu stricto’ estaríamos hablando de un fenómeno al estilo de Tron. Tomando un poco de aquí (Carlos) y un poco de allí (PereJ), lo que sí creo que debe ser importante es mantener la coherencia entre el canal real y el canal virtual, aunque tal y como podemos deducir del comentario de Crandell, siempre existirán las dobles vidas; al fin y al cabo, la virtualidad literaria off-line ya recoge el recurso al pseudónimo. Aun así, la coherencia se mantiene: yo cuando escribo en FM Waves me permito realizar comentarios y tratar temas que en determinados foros off-line no comentaría, o incluso en otros on-line; ahora bien, todos y cada uno de mis comentarios y aseveraciones son de Francisco, para lo bueno y para lo malo.
Lo de Vida Digital me suena demasiado trascendental. Vida no hay más que una, al menos eso creo… Prefiero seguir hablando de Imagen Digital, o de Relación Digital. Relaciones e Imágenes tenemos muchas, tantas como facetas y roles.
Además, espero que nadie sienta que su Vida es Digital, o es más Digital que Humana… sería un costo demasiado alto para la Seguridad Social… No quiero imaginar más psiquiatras resolviendo problemas de ansiedad y autismo digital…
Sin embargo, a mi la metáfora de carlos me parece muy adecuada. Vidas digitales podemos tener muchas. el anonimato que proporciona la Red lo permite.
Algunas personas, amparadas en este anonimato pueden expresarse de forma que no harían en su vida normal. Algunos sienten esta vida tan diferente que incluso crean un alter ego que les identifique en Internet.
Yo mismo en mi vida diaria soy una persona normal, pero como Louis Crandell sólo puedo actuar en el ámbito digital.
Finalmente la vida digital, es una interacción humana, contestar un anónimo es dirigirte a la nada.
Carlos, una buena reflexión …
Vidas Digitales http://twurl.nl/3jxm0f
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