Los coletazos del toro en Cataluña

El tema de la abolición de los toros en Cataluña sigue dando de si y me huele a mi que será un tema de batalla para unos cuantos durante mucho tiempo. El PP quiere interponer en Madrid una proposición de ley para que se les considere bien de interés cultural e incluso ya se está planteando por parte del sector taurino la interposición de un recurso ante el tribunal constitucional.

Me parece bien que sea un bien cultural, pero en el recuerdo, que ya toca evolucionar un poco y caracterizarnos por algo que no implique el sacrificio público de animales, que parece que el PP quiera montar un parque temático de una España más propia de hace 30 años que no de ahora.

Por el otro lado la plataforma PROU ya ha empezado a trabajar para que los Correbous también se incluyan en la prohibición de celebrar espectáculos con animales, cosa que espero llegue a buen puerto y que algunos partidos como CiU y ERC definan si su voto mayoritario a la prohibición ha sido realmente por un sentimiento animalista o sencillamente como dice la caverna mediática por un tema identitario. Y que la hipocresía de otros muchos al decir que es un tema sólo antiespañol se la tengan que tragar.

Pero en estos momentos lo que más me preocupa es que se acusa a la prohibición de ser un intento de romper lazos con España, también se está generando toda una corriente anticatalanista auspiciada por la derecha mediática. Podéis comprobar ya uno de sus efectos, un grupo en Facebook que promueve el boicot a los productos catalanes por la prohibición de los toros (ya cuenta con más de 5000 personas). Me asusta ver que hay tantas personas que no piensan en la verdadera motivación, y este hecho me hace ver más claro lo que el otro día leí, que el nacionalismo sólo ve nacionalismo.

Pero es que incluso «los barones del PSOE» acusan al PSC de hacer el juego al sector nacionalista. Señores del PSOE ya está bien de pensar en clave electoral y más teniendo en cuenta que el PSC aún habiendo dado libertad de voto a sus diputados sólo tres miembros del grupo parlamentario votaron a favor de la prohibición, hecho del que me alegro profundamente por la libertad de voto y del que, también, me apeno profundamente por que esperaba que hubiera alguno más antitaurino. Sólo espero y deseo que si la proposición del Partido Popular se llega a admitir, el PSOE y por supuesto los diputados del PSC no le den apoyo necesario para ello. A mi al menos, me haría replantearme muchas cosas.

No faltan ya argumentos en contra de la abolición alegando la desaparición del toro de lídia o de las propias dehesas, cuando en otro momento eso no pareció ser un tema importante para determinados partidos.

El caso es que los toros van a empezar, al menos de momentos, a dar las gracias a los burros catalanes:

Los toros se van a empezar a sentir un poco más libres (si pudieran hacerlo)…

Y si la abolición llegara al resto de España veríamos como la típica valla del toro de Osborne sufriría un profundo cambio…

En fin que veremos ir a los toreros hacia Madrid y a los toros hacia Catalunya…

Por qué si no, a partir del 2012 podremos ver a los toreros como una estatua viviente más en las ramblas…

Recordemos finalmente que Cataluña no es la primera comunidad que ha hecho algo así. Recordemos que fue Canarias hace 19 años y que allí también hicieron una excepción con los gallos de pelea y no se les acusó de independentismo ni de nacionalismo. Recordemos que Miguel Cabrera, miembro del Partido Popular, fue el impulsor de la ley que los prohibió en Canarias. Por lo que resulta muy curioso que en una comunidad autónoma se pudiera hacer sin problemas y de la mano del Partido Popular y ahora sólo quieran achacar todo esto a un sentimiento antiespañol.